Cuando tenemos un animal o mascota en casa, debemos ser conscientes de que aunque van a darnos todo el su amor y alegría, puede que en ocasiones enfermen y una de los males más comunes que suelen sufrir los perros en concreto son las infecciones urinarias de las que a continuación os hablamos para que conozcáis las causas, síntomas y cuál es el tratamiento a seguir para que puedan mejorar.
Causas de la infección urinaria en perros
Una y nfección urinaria, como nosotros, puede hacer que tu perro se sienta totalmente incómodo y esto puede derivar en accidentes en tu casa. Es importante tratar esta enfermedad rápidamente para brindar alivio a tu mascota enferma y prevenir que esta infección se vuelva más seria y pase a otros órganos.
Un perro puede coger una infección urinaria para tener muchas bacterias en su cuerpo. Esto suele suceder por una variedad de razones, como por la ingesta de agua contaminada o comer no limpia. También se puede presentar en los casos en que los perros tienen muchas bacterias alrededor de sus genitales , y es más común en los perros hembras ya que tienen una uretra más corta.
Síntomas de la infección urinaria en perros
El problema es que los perros no hablan ya veces notamos un comportamiento errático en ellos que hace que salten las alarmas. En el caso de las infecciones urinarias debemos notar que de repente nuestro perro se queja sin motivo aparente.
Por otra parte, un perro que tiene una infección urinaria orinará más frecuentemente de la misma manera que se mostrará sediento o con más ganas de beber que de costumbre y es posible que tenga algunos accidentes dentro de casa. Al momento de orinar puede sentir incómodo o con dolor, lloriqueando o escurriendo un poco de orina al caminar. En casos más severos la orina puede contener sangre, pus o cristales , e incluso puede tener mal olor. Y su abdomen puede estar muy suave.
También puede que notemos que nuestro perro tenga una infección urinaria si comprobamos que su pipi tiene un color amarillo muy fuerte, casi naranja o si notas un olor muy fuerte, o más fuerte de lo habitual.
Tratamientos veterinarios para la infección urinaria en perros
Si tu perro muestra alguno de estos síntomas de la infección urinaria es importante llevarlo a su veterinario para que lo revise. Si se deja sin tratamiento, la infección puede volver peor y se propaga desde la uretra en otras áreas, como hacia la vejiga o los riñones, lo que ya es mucho más complicado.
El trabajo del veterinario es importantísimo ya que conseguir eliminar la infección y por eso hará lo siguiente:
- Se han de eliminar bacterias de las zonas afectadas: vejiga y los riñones.
- Se han de eliminar bacterias que pueden acceder al aparato urinario a través del torrente sanguíneo
- Se debe regular el pH correcto de la orina (equilibrio de acidez / alcalinidad).
- Se ha regular que el perro no se queje al orinar.
- Se han de eliminar las que podrían ser causas de obstrucción como piedras o tumores (para ello el veterinario tiene que hacer una serie de pruebas en el perro).
Junto a este trabajo, también será necesario que el veterinario le recete a tu perro antibióticos y que servirán para eliminar la infección por completo.
Antibióticos para el tratamiento de la infección urinaria en perros
Tu veterinario te prescribirá antibióticos vía oral para el perro , éste es el tratamiento definitivo más efectivo. Un cultivo de orina puede ayudar a determinar el tipo de bacteria que afecta a tu perro, así que el veterinario te dará el tratamiento específico para ello. El tratamiento a seguir durante los días que te indique tu veterinario y es incluso posible que se lo termine aplicando él con una inyección si tu mascota no se traga las pastillas que te den. En todo caso, esto es algo que tendrás que hablar con tu veterinario para encontrar lo que es mejor para el animal.
Y en casa …?
Si la infección de tu perro no es muy grave, el veterinario te dejará llevarlo a casa y te dirá los cuidados que debes tener con tu mascota en casa. Vamos a verlos porque los conozcas:
1-. Limpieza e higiene
Lo primero que debes saber es que es de lo más importante que hagas una limpieza general de modo que no queden bacterias que le puedan afectar a vosotros. Para ello, sólo tienes que lavar las fundas de donde duerme tu perro o limpiar bien el suelo. No es algo que se pueda contagiar fácilmente, pero incluso para que el perro no vuelva a coger la infección es mejor tenerlo todo bien limpio.
2-. Los medicamentos a su hora
Los medicamentos que te ha dado el veterinario son de lo más importantes par ala evolución de tu perro o gato, por lo que es importante que se ‘ls des a las horas y en las cantidades que él te ha indicado. Como sucede con las personas, no puedes retirar el antibiótico antes del tiempo que se te diga, pues las bacterias podrían volver inmunes a él y volver a afectar tu mascota, la cual se debería tratar con medicación más compleja.
3-. El agua y la comida limpias
El agua y la comida que le des a tu perro pueden tener parte de la culpa de las infecciones por lo que es importante que tengas su comida siempre limpia así como el agua que le des. Si sales a pasear con él oa hacer deporte, evita que beba de los ríos y lleva una botella contigo que sea para tu mascota cuando tenga sed.
Si el veterinario te ha dado una alimentación específica para darle a tu mascota tienes que seguir sus instrucciones al pie de la letra tal como tienes que hacer con la medicación.
4-. No le achuches
Si tu mascota se ve triste o cansada, o si duerme todo el día, debes dejar que haga lo que mejor le vaya. Piensa que cuando tú tienes una infección tampoco estás al 100%. Lo único que tienes que tener en cuenta es que no haya síntomas de nada más complejo y tienes que ir viendo cómo va evolucionando tu mascota. De todas formas, piensa que es normal que se pase unos días sin moverse mucho, pero si ves que es algo que dura mucho o ves que no es nada normal en tu mascota, no dudes en visitar de nuevo al veterinario.
Con todo, tenemos que decirte que la mejor manera de evitar que tus mascotas cojan infecciones y otras enfermedades es preocupándonos por su salud. Debemos dar las vacunas cuando los toquen, así como también hemos desparasitar tanto por dentro como por fuera. Por último, no dejes comida en su cuenco ni agua por unos días. Es mejor que le pongas menos pero que lo cambies diariamente.