Los primeros meses de la vida de nuestro animal de compañía tienen una importancia decisiva para el resto de su vida, por lo tanto nosotros debemos ser conscientes de las decisiones que adoptemos en lo referente a su alimentación. Esto influirá para siempre en sus costumbres alimenticias y su estado sanitario.
Un nuevo cachorro
Cuando un perrito nace necesita inmediatamente ingerir alimento. Los cachorros deben tomar calostro (primera secreción láctea) lo antes posible, ya que con él tomarán el 90% de la inmunidad (defensas) con la que serán capaces de defenderse de los agentes infecciosos; el restante 10% lo adquieren en el interior de la madre antes del nacimiento.
A partir de las tres semanas de vida iniciaremos el destete, que comenzaremos introduciendo entre las tomas de leche materna algunas tomas de alimento seco para cachorro remojado con agua, alimento enlatado para cachorro o papillas de transición especialmente diseñadas para este fin.
Si elegimos la opción del pienso seco remojado con agua (la más interesante) iremos disminuyendo gradualmente la cantidad de agua hasta que en pocos días el animal coma el pienso seco. A la cuarta semana nuestro perrito debe ingerir únicamente este alimento.
Alimentos de crecimiento
La alimentación de los cachorros debe ser específicamente formulada para tal propósito y nunca debe añadir un extra de calcio y/o fósforo a esa comida, si no es por recomendación del veterinario.
También deben evitarse darle ningún alimento nuestro ni nada que no sea un producto exclusivamente para perros, de lo contrario, estaremos convirtiéndolo en un caprichoso crónico o desencadenaremos variados cuadros patológicos debidos al espectacular desequilibrio nutricional.
Es importante tener muy presente que si nos decidimos por un alimento de alta calidad y por tanto de fácil digestión y asimilación de nutrientes, el animal consumirá menos cantidad que si tuviera que alimentarse con otro alimento de peor calidad, peor digestión y mas difícil asimilación de los nutrientes. Ten esto presente porque además puede derivar en lento crecimiento, menor desarrollo, menor resistencia a infecciones,…
En animalesweb. confiamos en varias marcas de productos alimenticios que podrás elegir según las características de tu cachorro:
· Piensos cachorro razas pequeñas. Si tu cachorro no alcanzará un gran tamaño de mayor, te recomendamos alimentos como el Acana Puppy Raza Pequeña, especializado en este tipo de perros y que contiene proteínas que fortalecen los músculos; es rico en ácidos grasos omega 3, y posee algas y plantas orgánicas que mejoran el metabolismo. O el Iams Proactive Cachorros para Razas Pequeñas o Medianas, un alimento que favorece el desarrollo del cerebro para el mejor aprendizaje durante su etapa de adiestramiento.
· Piensos cachorros razas grandes. Si tu cachorro va a ser un gran perro algún día su alimento deberá tener un mayor aporte de energía, fortalecer sus futuros grandes huesos y músculos y satisfacer a un físico robusto. Purina Pro Plan Optistart Cachorro para perros de razas grandes puede ser una buena opción, igual que lo es Nutro Natural Choice Puppy Raza Grande.
· Alimentación húmeda. Este tipo de alimento puede servir de transición de la lactancia al pienso seco. Si tu cachorro es de raza pequeña (entre 1 kg y 10 kg) puedes probar con Royal Canin Mini Starter Mousse. Otra opción es el Hill’s Science Plan Canine Puppy que tiene ingredientes de fácil digestión, favorece el desarrollo del sistema inmunológico, el desarrollo de la vista y del cerebro.
· Snacks para cachorros. Los peludos pequeños tienen sus propios snacks, que refuerza sus defensas, les aporta la energía que necesitan tener a esta edad y no son tan fuertes como las de los adultos. Affinity Advance Baby Protect Puppy Snack cumple estas funciones. También lo hace Vitakraft Beef Junior, un premio con sabor a ternera para, por ejemplo, sus sesiones de entrenamiento.
