Cuando nuestro perro ha hecho algo que a nosotros no nos gusta normalmente lo sabe por nuestra expresión corporal, porque nos sale reñirle o por aprendizaje. Es entonces, en el momento que pillamos la fechoría que ha hecho, cuando nos pone ojos tiernos agacha, la cabeza y pone expresión de culpabilidad, ¿pero es realmente este el sentimiento que tiene? Vamos a averiguarlo.
Las personas solemos atropomorfizar las expresiones de nuestras mascotas porque es lo que nosotros conocemos. Cuando nuestro perro ha hecho algo “malo” y se pone cabizbajo con mirada “de lástima” percibimos esta expresión como culpabilidad o remordimientos. Esto no es así, según ha confirmado Alezandra Horowitz, experta en comportamiento canino y autora de ‘Dentro del perro: lo que el perro ve, huele y sabe’.
Método de estudio
Para llevar a cabo su estudio se utilizaron a 14 perros y a sus dueños, reuniéndoles en una habitación. Se puso un apetitoso plato en la estancia, después pidieron a las personas que ordenaran a perros no comer ese suculento manjar y, tras esto, abandonaran la habitación. Durante la ausencia de los propietarios, solo algunos perros recibieron el premio.
Cuando el dueño volvía a la habitación algunas personas fueron informadas de que su can había ingerido el premio, mientras que a otros se les dijo que su peludo amigo les había obedecido. Estas indicaciones, sin embargo, no siempre eran correctas.
Lo que ocurrió entonces es que algunos humanos vieron una cara de remordimiento en sus animales aunque estos hubieran sido de los que no habían ingerido nada (pero sus dueños creían que sí). Los humanos que pensaron que su perro les había desobedecido, y que en ese momento sabían que lo habían hecho mal, percibieron la característica mirada triste.
Conclusiones del estudio
La conclusión es que somos nosotros los que interpretamos esa mirada como culpabilidad, porque antropomorfizamos los gestos de nuestro perro cuando pensamos que han hecho una cosa u otra.
La gente ve culpabilidad en el lenguaje corporal de su perro cuando creen que el animal ha hecho algo que no debería hacer, pero la verdad es que los perros son completamente inocentes de toda ofensa. Ignoran qué es ofendernos, con lo cuál ignoran qué es la culpabilidad.
Los resultados de su investigación han sido publicados en la revista científica ‘Behavioural processes‘.
¿Qué significa realmente el gesto que hacen?
En esos momentos baja la cabeza, nos mira con ojos grandes o evita confrontar miradas, puede que tenga el rabo bajo e incluso, si nos acercamos, puede enseñarnos los dientes…. Son todos gestos de miedo. Estamos regañándole, adoptando una actitud corporal de enfado y lo que siente nuestro animal es miedo debido a nuestra reacción.
Sentimientos encontrados
Si bien es verdad, por otro lado, que humanos y animales compartimos algunos sentimientos, como han podido demostrar algunos científicos. Por ejemplo, la capacidad de querer, de pasarlo bien y de sufrir. Los perros tienen sentimientos y, además, de gran intensidad.
Debemos aprender a convivir con nuestros canes conociendo su comportamiento, los sentimientos que pueden experimentar y entendiendo que podemos ser muy distintos pero el amor que uno siente por el otro es el mismo. Por eso cada día en animalesweb. intentamos acercaros un poco más a las características de nuestros pequeños grandes amigos.
Fuente: Consumer
