Durante la lactancia canina los cachorros se apilan en las tetas de su madre para obtener la leche que tanto necesitan. Al hacerlo presionan esta zona con sus uñas lo que en ocasiones puede producir lesiones en las delicadas mamas de la perra, que al contar con un sistema inmune debilitado por el reciente parto puede ser víctima de infecciones en esta zona.
Dichas infecciones producirán una serie de síntomas en las mamas de la perra pero, adicionalmente, las bacterias podrán infectar también la leche y transmitirse a los cachorros mediante esta, ocasionándoles en casos más severos la muerte. Es muy importante vigilar de cerca la salud de nuestra perra con el fin de hacer que la misma esté saludable durante el amamantamiento, e impedir al mismo tiempo que los cachorros enfermen.